En un estudio retrospectivo de cohortes llevado a cabo en estudiantes de medicina y en residentes hospitalarios de la Universidad de Bari (Italia), se ha puesto de manifiesto que alrededor del 15% de los que recibieron dos dosis de vacuna triple vírica en el segundo año y entre los cinco y los seis años de vida carecían de títulos protectores frente al sarampión a la edad media de 21 años. De los negativos, el 93.4% respondieron a una tercera o cuarta dosis de vacuna.
A pesar de que no se existe recomendación sobre la realización de estas pruebas en personas correctamente inmunizadas (en particular, trabajadores sanitarios), los autores de este trabajo abogan por un screening de sarampión en sanitarios en formación que hubieran sido correctamente vacunados en la infancia como estrategia para minimizar los fallos vacunales primarios y secundarios. Los resultados se han publicado en The Journal of Infectious Diseases.