En un estudio retrospectivo de cohortes publicado en JAMA se ha estudiado una muestra de conveniencia de mujeres israelitas que lactaban a sus bebés y que habían sido vacunadas con dos dosis de la vacuna Comirnaty. Se recogieron muestras de leche una vez por semana durante seis semanas a partir de la segunda semana tras recibir la primera dosis para estudiar la IgG y la IgA.
Los niveles medios de IgA específicos frente al SARS-CoV-2 aumentaron rápidamente, especialmente a las dos semanas tras la primera dosis, donde el 62% de las muestras eran positivas, aumentando al 86% a la semana tras la segunda. Los niveles permanecieron elevados durante todo el seguimiento de seis semanas. Los IgG anti SARS-CoV-2 aumentaron a partir de la cuarta semana, con un 92% de muestras positivas que se incrementaron al 97% en las semanas 5 y 6. Los anticuerpos mostraron capacidad de neutralizar el virus pandémico.