Un estudio publicado en la revista Pediatrics ha constatado que los anticuerpos antisarampionosos transferidos transplacentariamente decaen rápidamente tras el nacimiento, de manera que a los tres meses de edad el 92% tienen niveles séricos por debajo del umbral protector.
El estudio se llevó a cabo en un hospital terciario de Ontario y sus autores plantean la hipótesis de que los lactantes puede que no estén protegidos frente al sarampión hasta los seis meses, como hasta ahora se pensaba. Un comentario acompañante de Walter Orenstein alertan sobre el riesgo de adelantar el momento establecido para la vacunación infantil ya que en los recientes brotes epidémicos en países de alta renta la incidencia en niños pequeñitos ha sido muy baja.
Adicionalmente, se puede alterar a la baja la respuesta a las revacunaciones. No obstante, apuntan a la vacunación precoz en caso de viajes a áreas endémicas.