La revista The Journal of Pediatrics ha publicado un estudio llevado a cabo en el Massachusetts General Hospital con 192 niños de 0 a 22 años (edad media de 10 años) con sospecha de Covid-19 que acudieron a urgencias o que fueron hospitalizados en los que se revisa la presentación clínica, la infectividad y la respuesta inmune.
Uno de los hallazgos más importantes fue comprobar como los niños transportaban altas cantidades de virus en la vía aérea superior, especialmente en los dos primeros días desde la aparición de síntomas, que, por otra parte, solían ser inespecíficos, del tipo de tos y rinorrea, o incluso ausentes. Ese transporte se constató incluso antes de presentar esos síntomas. Por otra parte, hasta un tercio de los escolares con síntomas durante el pico de Covid-19 en la comunidad en la que vivían tenían infección por SARS-CoV-2.
Los hallazgos, aunque es importante que se reproduzcan en otros estudios, sugieren que los niños pueden transportar altas cantidades de virus con o sin síntomas, lo que tiene que tenerse en cuenta a la hora de plantear la reapertura de las escuelas. A este respecto, inciden en la importancia de ser estrictos en las medidas de salud pública e incluso en establecer protocolos rutinarios de cribado de enfermedad en la comunidad educativa. Los autores reconocen que lo encontrado en su estudio contradice lo que se observó al inicio de la pandemia cuando parecía claro que era poco probable que los niños fueran el caso índice para la transmisión del virus en los domicilios.