Una encuesta reciente de la Organización Mundial de la Salud de la que se hecho eco CIDRAP ha encontrado que el 37% de los programas rutinarios de vacunación de los países todavía seguían, para finales del pasado año, experimentando disrupciones como consecuencia de la pandemia. En esa línea, UNICEF ha comunicado que ha entregado 28 millones de dosis menos de vacunas en 2020, lo que supone una caída del 12.2% desde los 2.290 millones del año 2019.
Las causas residen en los esfuerzos de mitigación y de reasignación de recursos con motivo de la pandemia. Uno de los responsables de los programas de vacunación de UNICEF ha comentado que no hay motivos de preocupación si los programas se interrumpen durante dos o tres meses, pero cuando van para 16 meses aumenta enormemente el número de susceptibles en la población.
La gran preocupación es si continarán descendiendo las coberturas de las sistemáticas en caso de vacunar frente a la COVID-19. Cuando el mundo se centró en controlar el virus Ébola en la República Democrática del Congo, se cayó en la cuenta de que morían más niños como consecuencia del padecimiento del sarampión.