En una publicación preprint se presentan los resultados de un estudio en el que se ensayó una vacuna proteica frente a la malaria basada en bajas dosis de circumsporozoitos, R21, junto a un adyuvante Matrix-M, en 450 niños de 5 a 17 meses habitantes de una zona de alta endemia de la enfermedad de Burkina Faso. Los niños recibieron tres dosis separadas por intervalos de cuatro semanas y con un recuerdo un año más tarde.
La vacuna R21/MM mostró un perfil de seguridad favorable. A los seis meses, el 29.5% de los que recibieron la vacuna con baja dosis de adyuvante, el 26% de los que recibieron la vacuna con alta dosis y el 71.4% de los que recibieron la vacuna control (rabia) desarrollaron malaria clínica.
La vacuna en cuestión, producida por el Jenner Institute del Reino Unido, utiliza la misma proteína que la otra vacuna en uso RTS,S/AS01, Mosquirix, de GlaxoSmithKline.